VARIACIONES SOBRE EL INSOMNIO
(Se) cierra la cortina
y, a la tarde, en copas.
Humo sobre las perlas y marfiles
cuando el cordón húmedo forjaba
la noche.
Aldea de espejos.
Anoche.
Aldea. Espejos.
De noche
un cielo con agua negra
y un recuerdo de botellas.
(A)fuera, en bares.
Ella conoció un hervor, el café,
el abrigo el desamparado
el talismán para morder
(crepúsculo),
las narices.
Aldea de noches.
Espejos.
Espejos. Noches.
Aldea.
De espejos
se cierra la cortina.
Y, al otro lado, cielo: del puro
color de lluvia, impuro
olor con fiebre,
sobre vacío,
sobre (mañana),
de nada.
El insomnio es un aliado de la inspiración.
ResponderEliminarMuy bueno. Y Borges presente. Y las aldeas de espejos.
Abrazo navideño, thanks for calling.
El insomnio es el factor desencadenante de las grandes poesías.
ResponderEliminarSeguimos en esta faceta, y yo contento de regresar... su poesía es placer para mis sentidos.
Amigo Victor, le dejo un abrazo grande y muchas felicidades para este fin de año.